Costa Rica es un país donde la naturaleza brilla con un esplendor único, y es que con tan solo el 0,03 % de la superficie terrestre mundial, posee aproximadamente el 6 % de la biodiversidad del planeta. La gran salud de sus ecosistemas es tal, que en los últimos poco más de 15 años, y al contrario que en muchos países, sus bosques y selvas han aumentado un 12%. De hecho, más de la mitad de su superficie está cubierta por estos. Políticas de recuperación y regeneración ecológica, así como múltiples medidas que apoyan el turismo de naturaleza sostenible, han hecho de este país un auténtico paraíso para los amantes de la naturaleza.
Pero no es solo un país en el que realizar turismo de naturaleza. Para la gente que les gusta relajarse en sus vacaciones, Costa Rica tiene mucho que ofrecer: playas paradisíacas, termas naturales y gente amable dispuesta a ayudarte a cada paso.
Si por lo contrario eres una persona de acción, tampoco te aburrirás. Caminatas por puentes colgantes entre el dosel arbóreo de bosques nubosos, tirolinas de más de un kilómetro y medio en las que vas colgado como Superman, rafting por ríos bravos con rápidos de hasta nivel 4+ (sobre 5) o buceo en los que te puedes topar con mantas y tiburones.
Hace poco más de medio año tuve la suerte de estar allí durante 15 días y disfrutar de su naturaleza, vivir auténticas aventuras y también tener mis momentos de relax. Pude gozar de su «Pura Vida«, término que acuñan para saludarse, desearse lo mejor o simplemente para describir algo bueno. Estas dos palabras las oyes en multitud de ocasiones cuando visitas el país. Aparte de haber sido un eslogan turístico, es un concepto que va mucho más allá y que define ese algo que tiene este país. Por eso tenía que estar sí o sí en el titular de este artículo.
Pero vayamos al grano, que me voy por la nubes. Vamos a ver qué lugares son los que deberías visitar en un viaje a Costa Rica. Pese a ser un país relativamente pequeño, más o menos la mitad de Castilla y León, en mi caso solo me dio tiempo a recorrer una pequeña parte de él. Hay tanto que ver y que disfrutar, que serían necesarios varios viajes para descubrir todas sus maravillas. Pese a todo, sí que es cierto que hay ciertos lugares que destacan sobre los demás y son los que la gente suele visitar. Allá van.
Parque Nacional Manuel Antonio
Es el parque más pequeño del país, pero también el más visitado. Los locales acuden en masa los fines de semana, así que si puedes evitar estos días podrás disfrutar de él con mayor tranquilidad. Este parque es uno los que tiene mayor cantidad y variedad faunística. Podrás ver con relativa facilidad y cierta cercanía a diversas clases de monos (capuchinos o carablanca, aulladores o congos, ardillas e incluso monos titis), coatíes, mapaches, perezosos, lagartos como iguanas o basiliscos…
Este parque no solo destaca por sus animales. Al estar pegado al mar, cuenta con numerosos miradores desde los que se tienen unas preciosas vistas del océano Pacífico. De hecho, uno de los grandes atractivos del Parque Nacional de Manuel Antonio son sus playas, unas de las más bonitas que vimos en Costa Rica.
Reserva Biológica Bosque Nuboso Monteverde
Situado a una altitud mayor que Manuel Antonio y con un clima más frío y lluvioso, los bosques nubosos de Monteverde ofrecen una estampa muy diferente a la mayoría de parques nacionales del país. Bosques frondosos poblados de árboles centenarios hacen de este lugar uno de los rincones más mágicos de toda Costa Rica.
La tremenda cantidad de vegetación que cubre esta zona ofrece numerosos escondites a las especias que lo habitan. Por ello, pese a que se puedan ver varios tipos de monos, mapaches, pizotes, perezosos o incluso tapires, no se observan en tanto número como en otros parques. Sin embargo, esta zona, debido a sus características, es uno de los lugares donde mayor variedad de aves y ranas hay.
Monteverde también destaca por ser un destino de aventura en Costa Rica. Se pueden realizar numerosas actividades, pero las más destacadas son el canopy (como se llama en Costa Rica a las tirolinas) o el paseo por puentes colgantes entre el dosel arbóreo.
Guanacaste, playas del Pacífico
Costa Rica es un país rodeado por el mar tanto por el este como por el oeste. Las playas de Guanacaste se ubican en la vertiente del Pacífico norte del país, en un entorno mucho más seco que el anteriormente citado Monteverde. Playas preciosas por las que pasear al atardecer mientras te tomas un coco fresco se encuentran en esta zona. Apetece, ¿verdad? Pero hay que saber cuál elegir y qué es lo que se quiere, porque podemos encontrarnos playas tranquilas como playa hermosa o playas del coco u otras como las de Tamarindo, más enfocadas al turismo de resort.
En nuestro caso no fuimos a Guanacaste por sus playas, sino por su buceo. Esta zona está considerada una de las mejores del país para practicar este deporte. Durante las inmersiones que hicimos pudimos ver mantas, morenas, caballitos de mar, peces globo e incluso un tiburón punta blanca (aquí os cuento mi experiencia). Pese a todo, Costa Rica no destaca por sus puntos de buceo si los comparamos con otros lugares como México, Filipinas, Jordania o Tailandia. Claro está, a excepción de la isla del Coco que se encuentra a 500 km de la parte continental del país y que está considerada como uno de los tres mejores puntos de buceo de todo el mundo.
Parque Nacional Volcán Tenorio
Pese a que este parque lleve el nombre de un volcán, no es conocido por él, sino por un río que atraviesa sus dominios, el río Celeste. Como bien indica su nombre, el color del río es de color celeste; de una tonalidad algo fantasmagórica en ciertas zonas. Pero ese tono no está producido por la magia, ni mucho menos, sino que es pura química. La confluencia de dos ríos de aguas transparentes, uno con un pH muy ácido y otro con abundancia de unas partículas especiales llamadas aluminosilicatos, hace que, mediante una reacción química se formen unas partículas que refractan la luz del Sol, pero solo en el espectro de los azules. ¿Magia? No, química.
Parrafadas de química aparte, en este parque destaca el río Celeste y su imponente cascada. Además, tiene la peculiaridad de que si visitas esta zona en una época en la que las lluvias han hecho acto de presencia, tendrás que realizar el trekking por caminos de barro que te llegan casi hasta las rodillas. Una experiencia muy divertida.
Parque Nacional Volcán Arenal
Aquí sí, el volcán Arenal es el protagonista indiscutible del parque y estando omnipresente en todo momento; siempre y cuando las nubes no te lo tapen, claro. Si tuviese que destacar algo de este parque sería los campos de lava que se pueden ver en la zona más cercana a la falda del volcán, así como la gran cantidad de aves, en especial tucanes, que se pueden ver por la zona. De hecho, os recomiendo encarecidamente que si visitáis este parque, intentéis realizar un tour de avistamiento de aves con un buen guía de la zona.
Al principio os decía que Costa Rica también es un destino de relax. Pues bien, un claro ejemplo de ello son los complejos termales que hay por esta zona. Con las termas Tabacón y las Baldi como las más conocidas y recomendadas, este lugar se postula como un buen punto en el que reponer fuerzas a mitad de viaje.
Parque Nacional Tortuguero
Ubicado en el Caribe norte de Costa Rica, este lugar es famoso por el desove de las tortugas. Este espectáculo de la naturaleza solo se produce en una época concreta, entre julio y octubre. El resto del año sigue siendo, en mi opinión, un lugar imprescindible en una visita al país. Los canales que conforman el parque, así como los monos, perezosos, serpientes, guacamayos e incluso caimanes que podrás ver son motivos de sobre para incluir Tortuguero en un itinerario por Costa Rica, aunque no lo visites en época de desove.
Este parque, y la localidad de Tortuguero, tienen la peculiaridad de que solo se puede llegar hasta allí en barco. No hay ninguna carretera que una el pueblo de Tortuguero con el resto del país, solo es accesible por medio de sus canales. Una razón más para ir hasta allí. Puede que esta sea una de las razones por las que a mí me pareció uno de los lugares más puros de todos los que visité en el país.
Parque Nacional Cahuita
En el Caribe sur costarricense se encuentra el Parque Nacional Cahuita. Por esta zona se respira otro ritmo de vida, más relajado, más pausado, con menos estrés, como si fuese a ritmo de reggae. Y es que a esta provincia del país llegaron numerosos inmigrantes jamaicanos para trabajar en las zonas bananeras y para la construcción del ferrocarril a finales del siglo XIX. Aquí encontré la esencia de esa Pura Vida que tanto oí durante el viaje.
Pese a que una tormenta tropical me dejase sin la posibilidad de disfrutar del buen snorkel que hay en la zona, este parque fue el que me brindó la posibilidad de ver tanto a perezosos, como a serpientes oropeles de cerca. Además, por la zona se encuentran dos centros de rescate de animales muy interesantes que os recomiendo que veáis si pisáis esta parte del país. El Centro de rescate Jaguar se ocupa de todo tipo de animales y The Ara Project se centra exclusivamente en la recuperación de guacamayos verdes.
Un largo etcétera
Estos parques y reservas que he citado son solo una pequeña parte de lo que ofrece el país. También hay otros lugares tremendamente interesantes como el Parque Nacional Corcovado, del que dicen que es el más salvaje del país; el Parque Nacional Volcán Irazú, donde se encuentra el volcán a mayor altitud de Costa Rica; el Parque Nacional Volcán Poás y su precioso cráter lleno de agua turquesa; o el Parque Nacional Marino Ballena, donde se pueden avistar ballenas.
Si os han entrado ganas de visitar este país os dejo más información en la siguiente guía de viaje publicada en el blog. Como dirán los costarricenses ¡Pura Vida!
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Razón: Alberto Hernáiz González publica en su blog Notas de un viajero, guías y crónicas de los viajes que realiza alrededor del mundo. En Vuélcate, publicará sobre los destinos más atractivos para inspirarte en tus futuros viajes.
Temática: Recorrido por los principales parques nacionales y reservas naturales de Costa Rica.
PAS: Alberto Hernáiz González. Administrador de la plataforma e-learning Open Campus UEMC.
Especialización: Cronista y fotógrafo de viajes.
