Nuestra Constitución establece en el artículo 25 que la finalidad de la pena es la rehabilitación y la reinserción social del penado. Con la entrada en vigor de la prisión permanente revisable en marzo de 2015, la población ha llegado a pensar que las penas realmente son inútiles a la hora de cumplir dicho cometido. Quizás lo que verdaderamente sea útil para nuestro sistema es la llegada de una nueva figura dispuesta a involucrarse al cien por cien en la reinserción del delincuente, y no tanto en el mantenimiento del orden y el cumplimiento de los castigos penales. Esa figura ya existe, y es el criminólogo.
Los criminólogos conocen mejor que nadie la génesis del delito por lo que, mediante informes criminológicos, pueden entender cuáles son los principales problemas que han llevado a un delincuente a saltarse las normas. Si empezamos la casa con unos buenos cimientos, en vez de por el tejado, tenemos la mitad del trabajo hecho, y disponemos de unos buenos obreros con excelentes materiales de construcción.
Y es que el criminólogo se encarga de estudiar todo lo relacionado con el delito y, por tanto, observa también su tratamiento. Mediante el estudio de las características del delincuente y de los medios reinsertadores disponibles, el criminólogo puede auxiliar a los profesionales de este ámbito a la hora de rehabilitar a los penados, de manera que se consigan resultados verdaderamente efectivos y beneficiosos para el futuro del preso y la seguridad de nuestra sociedad.
Por supuesto, no hay por qué conformarse con las medidas y penas actuales. Estamos formando una generación de verdaderos profesionales en la reducción de las reincidencias delincuenciales que podrían intervenir perfectamente en la política criminal de nuestro país, mediante el desarrollo de nuevos métodos de reintegración social y la mejora de los ya existentes. Penalistas y juristas deberían permitir el paso de la criminología al ámbito del derecho, en vez de cerrarle las puertas como si de una enfermedad se tratara.
La delincuencia sigue siendo un grave problema en el mundo y, por supuesto, su castigo también. Pero si algo sabemos es que los nuevos descubrimientos pueden llevar a nuevas soluciones, o a soluciones mejores. ¿Cuándo nos van a enseñar una nueva disciplina que ayude a combatir el delito? ¿Cuándo los profesionales de la reinserción dejarán de mirar la criminología como un estorbo? ¿Cuándo conseguirá la criminología el lugar que se merece en la reinserción social? De momento, no lo sabemos.
Razón: Los alumnos elaboran un artículo de opinión sobre el papel de la Criminología en la reinserción de delincuentes.
Temática: La Criminología contribuye a reinsertar al delincuente, evitando las penas.
Alumnos: Diego Torinos Fernández.
Curso: 2019-2020.
Asignatura: Técnica de comunicación eficaz.