En muchas ocasiones y, sobre todo, en el periodismo de investigación, se suele dar el caso de que una fuente solicite una retribución económica a cambio de la información que posee.
También son muchos los casos en que los medios de comunicación aseveran no haber realizado pagos por una información ya que esta práctica es contraria al código deontológico de estos profesionales.
Melchor Miralles, referente del periodismo de investigación, afirma que “sin filtraciones no habría periodismo” y en esta afirmación se sostienen quienes defienden el pago por este tipo de informaciones. Sin embargo, ¿no es cierto que una filtración se dirige al periodista por el interés que le genera la difusión de esta información? Por ello, en este caso, aún tendría una mayor justificación el que el suministro de una filtración se realice de manera gratuita ya que la propia fuente está obteniendo ya un beneficio con la posibilidad de su difusión.
Hay quienes convierten en su forma de vida el suministro de información. El derecho de expresión del periodista y el derecho a recibir información de la ciudadanía son, como su propio nombre indica, derechos; en virtud de los cuales nunca deberían ser cuantificados económicamente, sino que se habría de velar por su defensa con independencia de otro tipo de intereses.
Así pues, el pago por informaciones filtradas nunca debería darse en un medio de comunicación o periodista éticamente correcto y, por tanto, en ningún periodista ya que, como diría Kapucinski, “para ser buen periodista hay que ser buena persona”.
Razón: Artículo de opinión en el marco de la asignatura Periodismo de investigación y sobre el artículo de J. M. Caminos Marcet (1998) “Periodismo de filtración, periodismo de investigación”, publicado en la Revista Zer.
Temática: El periodismo no debe pagar por informaciones filtradas.
Alumnos: Ester Martínez Sanzo.
Curso: 2017-2018.
Asignatura: Periodismo de investigación.
