Comenzamos la temporada de la ciencia y me gustaría dedicarle este primer artículo a una mujer que me ha inspirado mucho, además de mi madre.
Conocida como la mujer más hermosa del cine fue también una inventora sin la cual no podríamos hoy estar leyendo esta columna. Hedy Lamarr inventó, en resumidas cuentas, un prototipo del actual WiFi. Pero su historia no se limita a este avance.
Comenzando en Europa con sus primeras películas, abandonó a su primer marido – un hombre que controlaba cada uno de sus movimientos – y viajó hasta París y de allí a Estados Unidos, donde su carrera como actriz despegó inevitablemente. Precisamente en el otro lado del charco comenzó a desarrollar esta invención que la ha hecho tan conocida.
Las grandes ideas aparecen como música en la cabeza
Hedy Lamarr conocedora del horror que traía consigo el régimen nazi, ofreció todo su conocimiento y contactos al gobierno de los Estados Unidos para poder frenar esta situación. Si bien esta brillante mujer se percató de algo. Las comunicaciones secretas eran tremendamente vulnerables ya que los enemigos las interceptaban y modificaban a placer.
Para poner remedio a esta situación Lamarr y el compositor George Antheil desarrollaron una versión temprana del salto de frecuencia, basándose en el funcionamiento de una pianola. Esta técnica permitía modular las señales en espectro expandido y para ello se servían de tambores perforados y sincronizados, como en el instrumento mencionado. Para poder cambiar así entre 88 frecuencias y poder dirigir torpedos que no detectasen los enemigos.
Muy bonito el cacharro pero, ¿para qué sirve?
Muy bonito el cacharro pero, ¿para qué sirve? Es lo que suena en mi mente cuando pienso en Lamarr y Antheil presentando su patente al Gobierno y estos mirando interesados como monos a una espada.
Dejando aparte que la patente de ambos estaba registrada con el apellido de casada de Hedy – en ese momento era Kiesler – y por lo cual no recibió el mérito que merecía hasta mucho después, el problema fue que la patente se registró en 1942 y hasta 1957 no fueron capaces de usarla con su completo potencial. Sylvania Electronics reconoció su utilidad y puso a trabajar en ello a su grupo de ingenieros. El principal problema que señalaron era el de pasar de un sistema mecánico a uno tecnológico.
De la crisis de los misiles de Cuba a buscar cómo se cuece un huevo
El primer uso conocido de la patente Lamarr-Antheil – como se conoció a partir de entonces – fue en la crisis de los misiles de Cuba del año 1962. En este momento de tensión política y militar, este sistema hizo posible que se pudiesen controlar de manera remota las boyas rastreadoras marinas. Tras ello se empleó en la guerra de Vietnam y en el sistema de defensa por satélite que tuvo Estados Unidos hasta la década de los 80.
Viendo todas las posibilidades que tenía el espectro expandido en la ingeniería civil y con la revolución digital de la época, fueron muchos los investigadores que trabajaron en ello hasta que se implantó la comunicación Wifi de hoy en día.
Una visionaria reconocida
Hedy Lamarr fue una gran actriz, pero creo que merece la pena recordar que aportó su ingenio e inteligencia en el avance de la humanidad. De hecho, aunque el invento del espectro sea el más destacado, también conviene saber que Hedy Lamarr colaboró en el diseño de los aviones tal y como son en la actualidad.
El magnate de la aviación y empresario Howard Hughes puso a disposición de Hedy Lamarr su equipo de ingenieros cuando ella apuntó ciertas mejoras al modelo de avión que existía por entonces – el cual era mucho más rectangular que el que ha pasado a la historia –. Entre ellas señaló que debería asemejarse a un ave para poder tener una forma más aerodinámica.
En la literatura se suele decir que Anónimo es un nombre de mujer; y, como sabemos, en la ciencia viene a pasar algo similar. Son muchos los casos de mujeres con poco o nada reconocimiento por sus aportaciones, inventos y descubrimientos. Por suerte, poco a poco la historia nos va descubriendo los nombres ocultos de esas figuras que desde las letras hasta las ciencias han aportado su visión para hacer avanzar a la sociedad.
(La foto proviene de https://parabrisas.perfil.com/noticias/hombres-de-auto/mujeres-de-auto-hedy-lamarr.phtml)
Twitter: @Mariaesp19
Instagram: mariaespinosa.19
Blog: Espantapájaros
Razón: La ex alumna de la UEMC María Espinosa escribe una columna sobre ciencia y divulgación llamada Un dragón en el garaje, haciendo alusión a la metáfora más famosa de Carl Sagan. En la columna se tratan temas científicos y divulgativos de una forma sencilla y amena.
Temática: Repaso a la invención de la actriz Hedy Lamarr que permitió desarrollar la actual conexión Wifi, Su labor en colaboración con el Gobierno de EE.UU y sus aportes a la aviación.
Antiguo alumno: María Espinosa Lorenzo.
Especialización: Grado en Periodismo en la UEMC. Trabajo Fin de Grado: Periodismo científico y homeopatía en la prensa digital generalista española. Especializada en Ciencia y divulgación.
Profesor responsable: Rosa María Arráez Betancort (Dpto. de Ciencias Sociales).