Nuevo año, nueva vida, ¿verdad? Nuevas experiencias, nuevos retos y nuevas emociones por descubrir. El año nuevo trae consigo un nuevo comienzo, una nueva oportunidad. También, por supuesto, trae consigo la oportunidad de descubrir nuevos farsantes, nuevas formas de protegernos ante los que afirman ser portadores de buenas nuevas que nos llevarán a la ruina, o peor, a la muerte. Como ya os prometí en octubre os voy a hablar sobre una de las pseudociencias que, a mi parecer, es de las más peligrosas que hay actualmente: la Nueva Medicina Germánica.
Un médico a la fuga sin licencia
Empecemos por el principio. Toda pseudociencia tiene a un gurú, un señor o señora que un día se despierta y decide que sus ideas más absurdas y sin contrastar son lo que la sociedad necesita. En el caso de la Nueva Medicina Germánica este gurú es Ryke Geerd Hamer, un médico al que se le revocó su licencia en 1986 por, básicamente, dejar morir a sus pacientes, es decir, por no ofrecerles el tratamiento adecuado para sus enfermedades. ¿Por qué? Os preguntaréis. Porque el ex doctor Hamer piensa que si tienes una enfermedad no es porque tu organismo esté fallando de alguna forma y haya que curarlo, sino porque tienes un conflicto emocional sin resolver y el dolor de padecer esa enfermedad es lo único que la cura.
Tras haberle revocado su licencia fue detenido en varias ocasiones por practicar la medicina de forma ilegal y por negar asistencia en caso de grave enfermedad. Tuvo orden de detención en tres países: Alemania, Austria y Francia.
¿Dónde comenzaron los delirios de este gurú? Tristemente, su propio hijo falleció a causa de un cáncer, años más tarde, Hamer padeció cáncer también y de ahí dedujo que su enfermedad había sido provocada por la tristeza que le había traído la pérdida de su hijo.
Desde luego, como cuento está muy bien, pero la mitología ya la dejamos atrás hace unos años. Todos sabemos que cuando llueve no es porque se enfade Zeus ni porque lloren los ángeles, al igual que las enfermedades no se provocan por conflictos
emocionales.
Te mueres y además sufres
No contento con toda esta paranoia, convenció a unos cuantos seguidores y creó un grupo muy unido para divulgar sus disparates. En la actualidad, tras la muerte de su fundador, estos grupos siguen en activo. No sólo te dicen que la enfermedad que tienes es por tu culpa, no sólo afirman que por medio del dolor que sufras te vas a curar, sino que, además, te desaconsejan en cualquier caso acudir a un médico, a uno de verdad. ¿Resultado? Más de un centenar de fallecidos a causa de los delirios de un hombre que se creyó más listo que la ciencia.
Las evidencias brillan por su ausencia en la Nueva Medicina Germánica y es que el estilo de vida y la genética son factores clave para la aparición de enfermedades, no las emociones.
Colaboraciones entre charlatanes
Como en todos los aspectos de la vida, cuando hay dinero de por medio siempre sale a la luz alguien dispuesto a hacer lo que sea necesario. La idea de que la enfermedad es culpa de quien la padece dio una brillante idea para crear algo llamado: constelaciones familiares. Un método para “liberar a las personas de sus tensiones y conflictos que son los que provocan las enfermedades”. Es decir, si unimos las ideas de Hamer con las constelaciones familiares… Voilà! Ya tenemos la solución perfecta para que los enfermos se dejen sus ahorros en algo que ni les va a curar ni les va a aliviar, sólo les aportará más dolor y una muerte segura.
Sobre ambas prácticas unidas hablaré más adelante ya que las constelaciones familiares junto con la decodificación biológica están a la orden del día y siguen campando a sus anchas mientras destrozan vidas y familias con sus cuentos y sus delirios.
Mientras tanto, si padece una enfermedad, no deje que nadie le venda remedios mágicos, no se crea unos cuentos que por muy bonitos que puedan ser no dejan de ser ficción. Acuda al médico, no se fíe de lo que le diga una persona sino de lo que le demuestra la ciencia. Como ya se ha dicho en tantas ocasiones: la medicina no lo cura todo, pero la pseudociencia no cura nada.
Twitter: @Mariaesp19
Instagram: mariaespinosa.19
Blog: Espantapájaros
Razón: La ex alumna de la UEMC María Espinosa escribe una columna sobre ciencia y divulgación llamada Un dragón en el garaje, haciendo alusión a la metáfora más famosa de Carl Sagan. En la columna se tratan temas científicos y divulgativos de una forma sencilla y amena.
Temática: Reflexión acerca de la Nueva medicina germánica, su creación y efectos, así como su similitud con otras prácticas pseudocientíficas. La Nueva Medicina Germánica es una pseudociencia peligrosa que afirma que las emociones son causadas por conflictos internos emocionales y su cura es el dolor.
Antiguo alumno: María Espinosa Lorenzo.
Especialización: Grado en Periodismo en la UEMC. Trabajo Fin de Grado: Periodismo científico y homeopatía en la prensa digital generalista española. Especializada en Ciencia y divulgación.
Profesor responsable: Rosa María Arráez Betancort (Dpto. de Ciencias Sociales).